Lluís Doménech i Montaner es otro de los principales protagonistas del modernismo catalán.
Nacido en Barcelona en 1850 y desde su juventud mostró gran interés por la arquitectura. Dedicó gran parte de su vida a la política y colaboró con el periódico "La Reinaxença".
En Doménech i Montaner se ve el paso de la arquitectura eclecticista al modernismo. Su producción puede dividirse en dos periodos, que giran en torno a 1900. El primero incluye obras juveniles y otras experiencias que desembocarán en la segunda etapa, considerada como la de su plena madurez.
Sus edificios se caracterizan por la combinación del racionalismo constructivo con una ornamentación inspirada en la arquitectura hispano-árabe y por las líneas curvilíneas típicas del modernismo. Al contrario que otros arquitectos del modernismo, Domènech tendió con el paso del tiempo a realizar edificios más ligeros, eliminando material en las estructuras pero manteniendo la ornamentación como elemento de primer orden. Contó para ello con la colaboración de diversos especialistas en las diferentes artes, arquitectos, escultores y artesanos.
Los primeros encargos de importancia para Doménech i Montaner se producen dentro del ámbito familiar, como es el edificio de la Editorial Montaner y Simón, realizado entre 1881 y 1885. Está construida con ladrillo rojo visto, logrando efectos decorativos que evocan a la arquitectura islámica. En la actualidad alberga la sede de la Fundación Tapies.
Restaurante El castell dels 3 dragons
Es el actual Museo de Zoología. En origen fue construido como restaurante con motivo de la Exposición Universal de 1888. Es un edificio ecléctico, de inspiración medieval, almenado, con torres angulares, y un friso de escudos de cerámica.
Los materiales empleados como el ladrillo y el hierro no se revisten, sino que se dejan a la vista.
La Casa Rull (1900)
Se encuentra en Reus. Sus fachadas combinan la piedra y el ladrillo y se rematan con almenas. En el primer piso hay un balcón con decoración floral en la barandilla. Las puertas y ventanas son de inspiración gótica.
A partir de 1900, se acentúa la integración de todas las artes en sus edificios de viviendas. Cada vez será más difícil separar lo arquitectónico de lo escultórico y pictórico.
Casa Lleó Morera (1902)
Es una de las casas más emblemáticas del Paseo de Gracia de Barcelona, en la famosa manzana de la discordia. Supone un magnífico ejemplo de la plenitud que alcanza el estilo floral del arquitecto y del horror vacui de la decoración.
Está concebida como una obra de arte total, en ella participan además del propio Doménech, Gaspar Homar, que diseña el mobiliario, los mosaicos y la marquetería y el escultor Eusebio Arnau.
Hospital de San Pablo (1901-1930)
Su origen se debe a la donación que hizo el banquero Pau Gil para construir un hospital. El proyecto inicial era el de un conjunto con cuarenta y ocho pabellones que se extendían a lo largo de nueve manzanas del Ensanche, finalmente, sólo se levantaron veintisiete.
Se compone de un edificio principal, dedicado a la administración, y de veintisiete pabellones en los que se desarrollan las tareas médicas y de enfermería. Todos ellos están unidos a través de galerías subterráneas, que sirven para el traslado de los enfermos.
Al edificio de la administración se accede por una amplia escalinata. A ambos lados, están la biblioteca y la secretaría y en un espacio separado, se encuentra la iglesia.
Todos los pabellones tienen gran interés, ya que cada uno de ellos es diferente del resto.
Fueron muchos los artistas que junto a Domènech participaron en el proyecto, como por ejemplo, Pablo Gargallo y Eusebio Arnau, que realizaron numerosas esculturas o Francesc Labarta, que diseñó las pinturas y los mosaicos.
Palau de la Música Catalana (1905-1908)
Inaugurado en 1908, es una sala de conciertos en la que se integran todas las artes.
En el exterior se mezclan elementos escultóricos, que aluden al mundo de la música, con elementos arquitectónicos y decorativos de carácter modernista. Las dos fachadas exteriores del edificio confluyen en una esquina presidida por una escultura de Miguel Blay. En el primer piso destaca la columnata con motivos florales, los bustos de compositores famosos y el gran friso alegórico al Orfeó Català.
En el interior, se combinan los diversos materiales de construcción con la cerámica y el vidrio. La sala y el escenario forman un conjunto armónico, uno se integra en el otro. La sala de conciertos cuenta con una gran claraboya central que permite una iluminación natural.
En 1971 fue declarado Monumento Nacional y en 1997 Patrimonio de la Humanidad.
Lluís Domènech i Montaner murió en Barcelona en 1923. Desempeñó un papel fundamental en la definición del modernismo catalán, como queda de manifiesto en un artículo suyo publicado en La Reinaxença, titulado "En busca de una arquitectura nacional", en el que quiere conseguir una arquitectura que refleje el carácter nacional catalán.
Fuente: http://www.arteespana.com/lluisdomenechimontaner.htm
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